Algo de "vidilla"...

   Os saludo de nuevo, en la segunda semana  del blog, al publicar otra entrada después de la anterior que sirvió de presentación. Sin duda conocéis mejor que yo (que me estreno)  la mecánica de comunicación de un blog con sus eventuales lectores y la eficacia que obtengan los temas tratados. Aquí, aunque la apertura de este sitio sea un resultado directo de la publicación del libro con el que comparte nombre, "Triannual", no es mi intención convertirlo en un básico instrumento publicitario de la edición del mismo porque la cultura, en toda su enorme amplitud, requiere de la libertad -por definición, consciente- en sus manifestaciones, ya sea para ejercitarla de forma individual o para compartir sus resultados en general.

   Para conseguir esto último es precisa la intervención voluntaria y conjunta de las partes interesadas en objetivos comunes, para dinamizar (o dar algo de "vidilla") a los métodos de relación y evolución, cualquiera que sea su nivel, su alcance o su eficacia: los medios de difusión, las artes escénicas, la música, la literatura, el cine, la ciencia y la tecnología, la información, la curiosidad personal, el ansia de conocimiento, el respeto mutuo entre opiniones, compartidas o no, la atención minuciosa hacia el mundo en que vivimos, no solo el urbano y el electrónico sino cuidando con decisión a la inquieta roca espacial que nos sustenta, al revuelto clima que nos facilita la existencia, al espacio que nos acecha silente pero activo y, para bien o para mal, a la evolución numérica de nuestra especie y su impacto sobre las diversas vidas terrestres que nos acompañan, así como atender al análisis del presente sin olvidar la necesidad de anticipar y facilitar la llegada del futuro.

   Confiando en que pueda venir al caso, voy a remitirme aquí, otra vez, al libro de referencia, para reproducir un párrafo de la contraportada (cuya redacción no es mía en este caso, sino de la editorial), porque tal vez resume mi propia diversidad: "... es, en definitiva, una llamada de atención sobre la necesidad de reordenar el presente con sentido común individual y colectivo, para hacer frente a los problemas y retos globales que amenazan el futuro".

   En este blog también podemos tener un pequeño instrumento para conseguirlo. Aunque grandes tentativas consigan grandes cosas, paralelamente muchos pequeños intentos unidos pueden igualar o incluso superar el resultado. Como ejemplo, si se pudiera llegar a aumentar el respeto (individual y conjunto) a nuestro entorno natural común o a exigir, al menos, que no se siga degradando por obra humana, tal actitud abarcaría, de hecho, todos los múltiples aspectos de nuestra vida planetaria actual y su futuro devenir, teórico y real.

   Porque hasta en la noche espacial vemos lucir, por lejana que nos parezca, la poderosa luz de las estrellas... parecen modestos farolillos temblando en un oscuro cielo pero, en su momento y lugar, iluminan, calientan y tal vez crean o extinguen vida, nada menos que en millones de Sistemas solares complejos, como el nuestro.

Hasta la próxima semana.